❖ Admira la zona arqueológica de Yohualichan
Siete kilómetros al norte de Cuetzalan despunta Yohualichan, el centro ceremonial que alguna vez perteneció a la gran Totonacapan, la región presidida por El Tajín.
Al igual que el de la gran urbe, su estilo arquitectónico se caracterizaba por sus cuerpos piramidales ornamentados a base de nichos.
Asentada sobre una ladera que decrece de sur a norte, diversos edificios fueron levantados sobre explanadas naturales; así, el juego de pelota ocupa la posición más alta con relación a la plataforma donde se localiza el centro ceremonial, que conforma un espléndido cuadrángulo compuesto por varias construcciones que dan al conjunto un impresionante aspecto.
❖ Asómbrate en sus grutas
En Cuetzalan existe el sistema de cuevas secas más grandes de América Latina con ríos subterráneos.
No pierdas de vista la Gruta Chichicazapan, la Cueva del Chivostoc y la Gruta Aventura; es la más cercana al pueblo y la más accesible. Desde su entrada hasta la gruta hay que hacer un recorrido de 420 metros.
Hay caídas de agua como El Salto o Las Golondrinas donde es posible practicar rappel, en la primera hay una tirolesa cerca, la segunda tiene una poza para nadar.
A la Cascada Corazón del Bosque, rodeada de helechos arborescentes, puede llegarse a caballo y luego a pie.
❖ Contempla la Danza de los Voladores
El domingo es uno de los días en que los hombres pájaro se descuelgan del tronco que hay en el pórtico de la parroquia. Se trata de la Danza de los Voladores, ese elocuente ritual prehispánico que resume la cosmogonía totonaca, la conexión entre hombres y dioses en todos los planos espaciales.
Esta manifestación que interacciona con la naturaleza y el universo y se ha transmitido de generación en generación fue declarada por la UNESCO Patrimonio Cultural Inmaterial desde 2009.
Otras actividades
❖ Pasea por los cafetales de Reserva Azul
❖ Aventúrate en sus cascadas
❖ Camina por el corredor artesanal
❖ Compra un penacho de recuerdo
❖ Cena en Peña Los Jarritos o en el Lienzo Charro